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13 de septiembre de 2013 - El celibato sacerdotal «no es un dogma de la Iglesia y se puede discutir porque es una tradición». Estas son palabras de monseñor Pietro Parolin —el nuevo Secretario de Estado del Vaticano que tomará oficialmente el cargo a partir del próximo 15 de octubre— pronunciadas durante una entrevista en Caracas con el diario venezolano El Universal.

Parolin defiende el valor de esta tradición que «se remonta a los primeros siglos», pero habla de «un gran desafío para el Papa», porque «él tiene el ministerio de la unidad y este tipo de decisiones se deben tomar para unir a la iglesia, no para dividirla». «Es posible —afirma— hablar, reflexionar y profundizar acerca de aquellas cuestiones que no son artículos de fe y pensar en algunos cambios, pero siempre al servicio de la unidad y de acuerdo a la voluntad de Dios».

El arzobispo dice, por lo tanto, que se trata de seguir «la voluntad de Dios y la historia de la Iglesia», así como «la apertura a las señales de los tiempos» como, por ejemplo, «la escasez de clero».

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(huffingtonpost.it / puntodincontro.mx / adaptación y traducción al español de massimo barzizza)