9
de mayo de 2013
- Italia es el destino más deseado del
mundo, somos el país al que más se le da
“clic” en Google, después de Estados Unidos
y China. El turismo puede producir 500 mil
nuevos puestos de trabajo entre hoy y el año
2020, de acuerdo con el plan estratégico
preparado por el ex ministro Piero Gnudi. Si
tomamos las decisiones correctas, podríamos
meternos a la bolsa 30 mil millones de euro.
Puesta del sol en la isla de Capraia dese el
Castagneto Carducci,194 m,
la casa donde nació el poeta Giosué
Carducci, en Toscana.
Y
no sólo está el potencial de la industria
turística, que hasta ahora genera empleo
sólo para una persona de cada 10, sino que
también existe la industria cultural y la
creativa. Son aquellas que giran en torno al
patrimonio histórico, artístico y
arquitectónico, produciendo una riqueza de
76 mil millones y empleando a un millón
cuatrocientas mil personas. Pero si
incluimos la artesanía, el diseño y el
Made in Italy, la economía de la cultura
vale 15% de nuestra riqueza y emplea casi a
1 italiano de cada 5. Y entonces, para salir
de esta crisis, ¿por qué no nos concentramos
en lo que sólo nosotros tenemos?
Viñedos en
terrazas en proximidad de las “5 terre”, en
Liguria.
Los tipos de turismo que se catalogan en el
mundo son 160, de los cuales Italia puede
ofrecer 100, empezando por el turismo
relacionado con el patrimonio cultural —en
el que somos únicos en el mundo— al de la
comida y del vino, de las montañas, de los
mares, de los lagos, de los ríos, de las
zonas rurales, etc. Es un sector
estratégico, en crecimiento, que puede dar
trabajo a mucha gente, pero para que los
turistas lleguen de todas partes del mundo,
tendríamos que sabernos organizar.
El
anfiteatro romano de Luni,
en Liguria
Los sitios web de nuestro patrimonio
cultural son silenciosos. El concepto es
«aquí estoy y los espero con los brazos
abiertos», pero si el turista está en otro
lado, no llega porque no sabe que existen.
Sólo unas pocas regiones participan
activamente en las redes sociales. Además
del turismo en las ciudades del arte —los
tradicionales viajes a Roma, Florencia y
Venecia— Italia tiene muchas otras
posibilidades para ofrecer: el turismo
gastronómico, enológico, el turismo activo,
el turismo de descubrimiento, el turismo
rural...
Pero no los promovemos lo suficiente. La
culpa es de un sistema que ya es viejo: la
responsabilidad del turismo la tienen las
Regiones, pero también las Provincias y los
Municipios. Todo el mundo quiere ser el
mejor, pero olvida el elemento fundamental:
hoy el turista es el que decide, ya no
ellos.