12 de junio de 2019 - Hace unos días, el embajador de Italia en México, Luigi Maccotta, quien a principios de julio concluirá su mandato en este país latinoamericano, concedió una entrevista a Puntodincontro. A continuación, el texto integral:

Señor Embajador, usted dejará México en unas cuantas semanas después de poco menos de tres años. ¿Qué Italia encontró aquí?

Bueno, es evidente que en estos casi tres años conocí a muchas personas, viajé casi a todos lados, me reuní con las comunidades y debo decir, francamente, que encontré un nivel cualitativo de nuestros connacionales en México muy alto. Y esto en todos los sentidos: empresas, profesionales, particulares e instituciones. Me refiero a la Cámara de Comercio, a la Dante Alighieri, a la red de Cónsules Honorarios, a la Embajada, al Instituto de Cultura, al ICE, a la Asociación Italiana de Asistencia Italiana y al Comites.

Encontré, como básicamente esperaba, individuos motivados, inteligentes, capaces, adaptados, con un profundo conocimiento de la realidad mexicana y con excelentes contactos, que a menudo me han sido útiles. Encontré una comunidad felizmente enraizada e instalada en México, pero con fuertes conexiones y vínculos con Italia. En otros contextos donde serví a los italianos y a sus descendientes, no tenían el mismo nivel de relación con nuestro país. Aquí, sin embargo, la italianidad continúa nutriendo y alimentando sus raíces culturales. Esto me sorprendió y me impresionó muy positivamente. Es un mérito de los italianos en México, de su inteligencia y de su capacidad para cabalgar a dos culturas de manera armoniosa y sinérgica.

Las relaciones entre Italia y México involucran a muchos sectores. Experimentamos un período de gran interés cuando se dio la apertura de la industria de la energía en este país latinoamericano y hoy ENI y Enel son muy activas aquí. ¿De parte del Bel Paese continúa existiendo la intención de explorar posibilidades en otras áreas?

Sin lugar a dudas, México está pasando por una fase de transición, de transformación, por lo que diría que estamos en un momento de reflexión, de análisis de lo que está sucediendo, lo que lleva a las empresas a reposicionarse y a considerar sus planes. Creo, sin embargo, que existe una constante: la posición geologística de este país. Se encuentra en la intersección entre el Norte, el Sur, la zona de Asia-Pacífico y el Atlántico, con un componente europeo muy fuerte. Esto no cambia. También hay factores tales como una fuerza laboral calificada, profesionalmente de buen nivel y aún competitiva en costos, condiciones que motivan sin duda a quedarse a las empresas que ya están aquí —aunque tal vez ajustando los objetivos y adaptándose a nuevas realidades e interlocutores— y a las empresas italianas que aún no han llegado, pero que lo están considerando, a tomar la decisión lo antes posible.

En este sentido, vino la semana pasada el Subsecretario Merlo encabezando a una comitiva empresarial en preparación para la misión de sistema que debería llevarse a cabo más adelante este año. Es una iniciativa del Ministerio de Desarrollo Económico, junto con Confindustria y un grupo de empresarios. Creo que sinceramente, más allá de los cambios que pueden existir y las reformas que pueden interpretarse de una u otra manera, las ventajas, oportunidades y motivaciones para venir a México y quedarse no han sido modificadas.

¿México tiene interés en invertir y exportar más en Italia?

Me sorprendió mucho una frase del actual Jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, Alfonso Romo Garza —quien además es un amigo que me ha ayudado mucho durante este último año a leer y entender al nuevo gobierno del Presidente López Obrador— quien dijo que México tiene acuerdos de libre comercio con decenas de países, pero que con todos tiene un déficit comercial. El país quiere hacer más, quiere intentar exportar más

Este es el primer dato, por lo que, en cierto sentido, los mexicanos se dan cuenta de que no han estado lo suficientemente activos desde este punto de vista. Un segundo aspecto, después de conocer a grandes empresarios como Daniel Servitje de Bimbo y Eugenio Madero de Rassini, con quienes a menudo hablo sobre temas que tienen que ver con las inversiones mexicanas, es que quizás deberíamos preguntarnos si existen las condiciones en Italia para atraerlas. La promoción insuficiente de lo hecho en México es ciertamente un problema de este país, pero la insuficiencia de los instrumentos y las condiciones que pueden atraer más inversiones extranjeras es un problema italiano.

México está experimentando un momento de gran tensión desde el punto de vista comercial debido a las amenazas de aranceles “punitivos” si no se obtienen resultados a corto plazo que puedan ayudar a los Estados Unidos a controlar la inmigración proveniente de América Central, por lo que la diversificación de las importaciones y exportaciones de este país parece hoy más que nunca una prioridad urgente. ¿Cuál es la situación del tratado con la Unión Europea?

El tratado con Europa es mucho más ambicioso que un acuerdo de libre intercambio: además de los aspectos comerciales, incluye temas políticos, de derechos humanos y de cooperación para el desarrollo. Por eso tiene una dimensión estratégica muy importante. Está en la recta final, aunque hay ajustes menores. En los últimos días estuve hablando con el subsecretario de Relaciones Exteriores, Julián Ventura, y él también comentó que confía en que se finalice en breve.

En cuanto a la situación actual con los Estados Unidos, creo que estas situaciones no deben juzgarse con base en las palabras de los políticos, sino fijándonos en sus acciones. Se han dicho muchas cosas en los últimos meses que no han sucedido, así que ya veremos. En la relación comercial, México ya es el primer socio de los Estados Unidos, por lo que creo que se trata de una escaramuza dentro de una familia y no de un conflicto entre enemigos.

¿Ya se sabe quién será su sucesor en México?

Aún no, sin embargo, ya fue nombrado el nuevo Embajador de México en Italia, Carlos García de Alba, actualmente Cónsul General en Los Ángeles.

García de Alba ha estado en nuestro país y habla muy bien nuestro idioma. Es una excelente opción y un signo importante de consideración por parte del gobierno mexicano, que envía a un embajador de grado, un gran profesional, una persona que tendrá la sensibilidad y las herramientas para entender a Italia y promover la profundización de las relaciones bilaterales.

¿Quiere agregar algo, Embajador?

Sólo quiero decir que aprecio mucho a todos los italianos que conocí aquí, comenzando por mi pareja Silvia Carusillo, una actriz nacida en Cerdeña que vive en México desde hace 26 años, donde se ha dado a conocer en el mundo del cine, del teatro y de la televisión.

Encontré gente muy capaz, empezando por ti, Massimo. Realmente quiero expresarte mis más sinceras y amistosas felicitaciones por tu trabajo, que realizas de manera extraordinaria, sin ayuda y con pocos recursos. Siempre logras cubrir noticias importantes. Yo diría que si uno quisiera ver lo que realmente importa en medio del ruido del mundo, al leer Puntodincontro y Massimo Barzizza identificaría inmediatamente los puntos sobresalientes del día.

Gracias a todos los italianos y también a los mexicanos. Tal vez sea trivial decirlo, pero otra cosa que me llamó la atención es el amor que los mexicanos sienten por Italia. Es una constante en el mundo: los extranjeros nos admiran y nos aman, por la cultura, por el Renacimiento, por la creatividad... pero también por nuestra humanidad. Después de todo, el italiano tiene esta gran capacidad de relacionarse de manera abierta y amigable, un don que también caracteriza a los mexicanos y que nos une mucho.

Mi mensaje es: sigan así y hagan aún más. Nunca se detengan. Quien se detiene está acabado y termina por perder lo alcanzado. Estoy seguro de que a mi sucesor le irá muy bien y tal vez encuentre pistas que yo no supe identificar. Estamos de paso por aquí y, lamentablemente, nuestros mandatos son breves, pero México es un país que te conquista, por lo que también en lo personal he llegado, de vez en cuando, a considerar la posibilidad de quedarme. Ya veremos. Por el momento vuelvo a Roma, espero mantener las amistades aquí y envío un abrazo virtual a todos los amigos italianos de México.

(massimo barzizza / puntodincontro.mx)