5 de julio de 2015
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AT&T planea invertir aproximadamente 3 mil
millones de dólares para expandir su red
móvil de alta velocidad en México, de
acuerdo con Randall Stephenson, CEO del
gigante estadounidense de las
telecomunicaciones, quien se reunió hace
algunos días con el presidente Enrique Peña
Nieto para darle a conocer estos programas.
Esta inversión es equivalente al total de
las anunciadas por KIA, BMW y Toyota para la
instalación de tres plantas de producción de
autos en México, cada una por mil millones.
La nueva red celular planea alcanzar los 100
millones de usuarios en esta nación
latinoamericana hacia 2018. «Estamos
construyendo una infraestructura que sea
capaz de traer innovación y vitalidad
económica al país, tal como hemos hecho en
Estados Unidos», dijo Stephenson en un
comunicado.
La inversión anunciada a finales del mes
pasado se suma a los 4 mil 400 millones de
dólares que la firma destinó previamente a
las adquisiciones de Iusacell y Nextel.
«Es la inciativa más amplia en
telecomunicaciones que se ha dado en los
últimos 10 años de parte de un proveedor de
servicios que no sea América Móvil», comentó
Jorge Negrete, director de la agencia
informativa y consultora Mediatelecom Policy
& Law, y otros especialistas del sector
coinciden en que los planes de AT&T para el
mercado mexicano indican que buscará
competir fuertemente, provocando
—probablemente— la reactivación de las
inversiones por parte de América Móvil, que
opera en México con el nombre de Telcel, la
cual optó por expandirse en Europa ante las
regulaciones asimétricas que enfrenta
localmente.
AT&T contempla construir la primera red de
telecomunicaciones binacional en México y
Estados Unidos con una cobertura de 400
millones de personas y negocios, para
aprovechar las sinergias económicas entre
ambos mercados. Actualmente cuenta con 6
millones de clientes de telefonía móvil con
Iusacell y Nextel, los cuales representan
cerca del 25 por ciento de la base de
usuarios de pospago del mercado mexicano.
«Los programas prevén la construcción de una
avanzada red móvil, que incluye la
actualización de sitios existentes y la
creación de sitios nuevos, aumentando la
capacidad de transporte y fortaleciendo y
expandiendo el sistema minorista de puntos
de venta», explicó Mariloly Melguizo, vocera
de AT&T México.
Según las proyecciones de la corporación
estadounidense —que ha llegado a ser en
algunas ocasiones la compañía telefónica más
grande del mundo— la primera fase del
despliegue de red concluirá en los próximos
seis meses con una cobertura de 40 millones
de personas. Hacia finales de 2016 aumentará
a 75 millones de habitantes y para 2018
alcanzará a cerca del 84 por ciento de la
población de México.
Stephenson ha afirmado que buscarían
desplazar a América Móvil del primer lugar
en el mercado móvil mexicano en el
transcurso de los próximos 10 años. Después
de la adquisición de Iusacell y Nextel, AT&T
es actualmente el líder en posesión de
espectro radioeléctrico en el país, seguida
por Telcel y Telefónica, aunque la
penetración de las redes 4G y LTE en América
Latina —2.4 por ciento de un total de 683
millones de conexiones móviles en este
subcontinente, muy por debajo del promedio
global de 8.8 por ciento— aún es considerada
insuficiente.
(massimo
barzizza / puntodincontro.mx)
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